toleradas por FM y por guerra de guerrilla
de ELN
El 9 de noviembre, hacia las 9:00
a.m. ingresaron al cabildo de Nuevo Cañaveral del Resguardo de
Embera de Urada Jiguamiandó alrededor de 100 irregulares de las
autodenominadas “Autodefensas Gaitanistas de Colombia” (AGC)
uniformados, portando armas de fuego de largo alcance y radios de
comunicación.
A eso de la 1:00 p.m., los AGC
obligaron a las y los comuneros a asistir a una reunión; allí
afirmaron que no le harían “daño” a nadie, no había porque
tener miedo.
Los integrantes de las AGC
manifestaron que cómo el ELN estaba sembrando minas antipersona,
ellos debían hacer lo suyo. Uno de ellos agregó que cómo no iban
hacerle nada a nadie, no era necesario denunciar.
Éste mismo reiteró
que si denunciaban ellos se enteraban por sus amigos en las
instituciones.
Al caer la tarde los armados tomaron
el camino que de la comunidad de Nuevo Cañaveral conduce a la finca
Bracharia. Los pobladores presumen que los AGC pernotaron toda la
noche en ese lugar.
Un día antes, el jueves 8 de
noviembre, siendo las 5:00 p.m., ingresaron al cabildo de Nuevo
Cañaveral, del Resguardo de Embera de Urada Jiguamiandó, tres
sujetos vestidos de civil, quienes fueron identificados como miembros
de la estructura neoparamilitar de las autodenominada “Autodefensas
Gaitanistas de Colombia”, AGC.
Los sujetos realizaron un recorrido
por el lugar y luego se retiraron.
Como se recordará, el viernes 3 de
noviembre guerrilleros del ELN iniciaron la instalación de minas
antipersonales en algunas comunidades del territorio colectivo de
Jiguamiandó. El ELN sostuvo que conforme a los principios de su
organización para evitar daños irreparables manifestaron a la
población que debían evitar usar los caminos y transportarse casi
que exclusivamente por los ríos.
El anuncio guerrillero afecta de
manera particular a las siguientes comunidades: Urada, Puerto Lleras,
El Ovo, Vergel, La Laguna y Bracitos o Pueblo Pipón.
Entre tanto, las autodenominadas ”
Autodefensas Gaitanistas de Colombia”, AGC, continúan haciendo
presencia en el territorio colectivo, movilizándose libremente entre
las comunidades de Urada, Puerto Lleras y el Reguardo Embera de Urada
Jiguamiandó vestidos de civil y camuflado, y reclutando pobladores
que les sirven de puntos o informantes.
El territorio colectivo y los
resguardos de Jiguamiandó son estratégicos en la circulación al
pacífico y Antioquia, territorios donde hay siembras ilegales de
coca y extracción minera con daños ambientales y sociales, debido a
la exclusión social agudizada desde 1996.
Bogotá, D.C., noviembre 10 de 2017
Comisión Intereclesial de Justicia y
Paz
No hay comentarios:
Publicar un comentario