Imágenes


Mostrando entradas con la etiqueta #elecciones2023. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta #elecciones2023. Mostrar todas las entradas

sábado, 14 de octubre de 2023

carta No. 206: Elegir es decidir

 

Con los ojos fijos en Él

en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 206 – 15 octubre 2023
---------------------------------------------

Elegir es decidir

 “En la prisa de la vida hay que tener la valentía de detenerse y elegir…  «Hoy, en el momento en que nos detengamos para pensar en estas cosas y tomar decisiones, elegir algo, sepamos que el Señor está con nosotros, está a nuestro lado, para ayudarnos.   Nunca nos deja caminar solos. Está siempre con nosotros.  Incluso en el momento de la elección»”  Papa Francisco. 

Hemos repetido insistentemente que frente a las elecciones debemos informarnos muy bien para tener los elementos que permitan tomar la mejor decisión, más aún si escogeremos a quien dirigirá los destinos del país y que tiene como reto sacarle de una situación extremadamente compleja y delicada. Al consignar el voto decidimos el futuro que queremos y anhelamos para el país y nuestra familia, hijos, nietos, amigos…  El voto tiene mucha connotación y poder en nuestro presente y devenir.  Elegir es decidir.

Al decidir el voto optamos por una ventana abierta al futuro.  Es la afirmación de una esperanza porfiada en días mejores, es una manifestación de confianza en la propuesta del candidato que en nuestra simpatía dirigirá los cambios que requerimos, es la selección de un camino que queremos recorrer liderados por alguien que, según nosotros, tiene un itinerario claro, contundente y certero para enfrentar y solucionar esta crisis integral y profunda.

Este balotaje se da en un ambiente más polarizado, en medio de la incompetencia gubernamental sin un plan ni estrategias para enfrentar la violencia, dentro de una crisis sistémica que nos afecta directa e indirectamente, con manifestaciones de desinstitucionalización mayúsculas que ponen en riesgo la continuidad del Estado, que muchas veces dan la sensación de vivir en una anomía, en una sociedad que se mueve por inercia, desorganizadamente, sin normas sociales y en la que cada quien trata de pescar a río revuelto.

En este contexto, nuestro voto es, quizá, el último recurso que tenemos como pueblo para vencer el miedo, reclamar seguridad, exigir mejores condiciones de vida, rechazar la corrupción e impunidad, demandar cambios drásticos y urgentes ante tanta desidia, censurar tanta politiquería barata y desacreditada, anhelar un país con instituciones sólidas, confiables, respetables, creíbles, incólumes, honestas, probas que garanticen el buen funcionamiento del andamiaje estatal.  Todo esto nos exige votar por los mejores candidatos, pues está en juego el bien y el futuro de nuestra Patria.

El Consejo Nacional Electoral tiene una responsabilidad superlativa: respetar y garantizar la transparencia del proceso para que no haya ninguna duda y los operadores políticos y ciudadanos aceptemos los resultados sin ninguna objeción. 

Luego de estas elecciones, pensemos hacia adelante para vencer la incertidumbre, buscar la unidad, generar acuerdos mínimos que permitan gobernar en función de país, mirar la realidad con “ojos de Ecuador” para dejar a un lado los intereses personales y de grupo y poner por delante los logros nacionales.  Hay una tarea emergente, urgente y permanente: encontrar las ideas fuerza que permitan determinar dos o tres objetivos nacionales para, de manera conjunta, trabajarlos el sector privado y público con el fin de vencer la postración y el descalabro en que vivimos.  Nadie se queda fuera ni se excluye.

Estos momentos aciagos son grandes oportunidades para descubrir y encontrar senderos que nos abran nuevos rumbos, en donde todos participemos activamente, cumpliendo nuestras responsabilidades y exigiendo nuestros derechos, participando y creando nuevas oportunidades, innovando y recreando una sociedad más justa, más pacífica y más humana, cumpliendo y haciendo cumplir la Constitución y las leyes, siendo “buenos cristianos y honrados ciudadanos”.  ·  #ComuniquemosEsperanza

 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

sábado, 23 de septiembre de 2023

carta No.203: El presidente que necesita Ecuador

 Con los ojos fijos en Él

en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 203 – 24 septiembre 2023
---------------------------------------------

El presidente que necesita Ecuador

“Oramos hoy por los gobernantes que tienen la responsabilidad de cuidar a sus pueblos en estos momentos de crisis: jefes de estado, presidentes de gobierno, legisladores, alcaldes, presidentes de regiones...  para que el Señor los ayude y les dé fuerzas, porque su trabajo no es fácil.  Y cuando haya diferencias entre ellos, entiendan que, en tiempos de crisis, deben estar muy unidos por el bien de los pueblos, porque la unidad es superior al conflicto”.  Papa Francisco, mayo 2020.

El próxima 15 de octubre elegiremos al presidente del Ecuador.  En varias cartas hemos ponderado la importancia y responsabilidad de dar el voto a tal o cual candidato. Es darle el poder y capacidad de tomar decisiones y actuar buscando el bien de todos.

Es una elección de mucha importancia. Quien resulte elegido durará en sus funciones hasta el 24 de mayo de 2025, este gobierno deberá enfrentar grandes desafíos, pues el país sufre graves problemas que exigen urgentes acciones.  Aquí algunos:

1.  Una situación de violencia social como nunca ha vivido nuestro país.  Perdimos la calma, hay miedo y la inseguridad nos amenaza a todos, a algunos con mayor fuerza y agresividad.  Problema complejo y de difícil solución, pero de inmediato y urgente enfrentamiento.

2.  Un creciente desempleo y aumento de la pobreza. Cada vez hay más pobres. Las manifestaciones y consecuencias son múltiples: desnutrición, deserción escolar, violencia doméstica y callejera, suicidios, emigración temeraria, etc.

3.  La realidad de niños y jóvenes, principalmente en sectores populares y periféricos, que engrosan las filas de las mafias y el narcotráfico, abandonan la educación y se convierten en víctimas del abuso sexual, la prostitución y el tráfico de órganos.

4.  La llegada inminente del fenómeno de El Niño, con grave amenaza de devastación de grandes poblaciones y extensiones territoriales.

5.  Una crisis política y económica con múltiples quejas, acusaciones, síntomas y escándalos que derivan de una descomposición institucional a todo nivel.  Se escucha de graves crímenes, la existencia de narcopolíticos, narco generales; policías, militares y jueces cooptados con prebendas o miedo, por carteles internacionales.  Hay acusaciones de un sistema electoral corrompido y tramposo que no respeta la voluntad de los electores.  La instauración, en la administración pública y privada, de la coima, la comisión, el sobreprecio −aberraciones criminales, penadas en cualquier país− como si fueran modus operandi normal y necesario para que las instituciones funcionen; y para colmo, individuos investidos de jueces que pretenden mediante providencias amañadas, consagrar la impunidad.

Podríamos continuar relatando la tragedia nacional, sin embargo, queremos más bien poner énfasis en los requerimientos y exigencias para el próximo gobierno nacional. Dada la magnitud de los desafíos la primera tarea del nuevo gobierno es, no de palabras sino de actitudes y hechos: convocar a toda la ciudadanía a un debate nacional abierto, sincero y desprendido, que lleve a un acuerdo o pacto de convivencia y civilidad.  El triunfador no puede hacer del Estado un botín de uso y abuso de ‘agnados y cognados’ cercanos al gobierno.  Como tampoco los perdedores pueden convertirse en opositores ciegos, detractores y conspiradores a tiempo completo como en los últimos tiempos.

El diálogo nacional que reclamamos y exige el país, supone una actitud franca, diáfana, transparente de todos los actores, empezando por los gobernantes, en el que las ideologías no se constituyan en reclamos de dominio por encima de las necesidades del pueblo.  Aunque las luchas intestinas se presentan como reivindicadoras de intereses populares, con frecuencia son artimañas de los grupos detentadores del poder o de sus aspirantes frustrados.  La Democracia se nutre, ante todo, del diálogo y la búsqueda de acuerdos, en donde cada uno tiene su palabra, a condición de que sepan escuchar a los otros, particularmente a los que piensan distinto.

Entonces necesitamosQue todos aunemos esfuerzos en favor de la Patria. Que el diálogo, arraigado en la verdad y la justicia, sea el camino a las soluciones. Que construyamos procesos de encuentro y compromiso por el bien común, desterrando la corrupción, recuperando la ética y los valores.  ·  #ComuniquemosEsperanza

 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

sábado, 26 de agosto de 2023

carta No.199: La campaña electoral que queremos…

Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 199 – 27 agosto 2023
---------------------------------------------

La campaña electoral que queremos…

“¡No pierdan nunca la valentía de soñar y de vivir en grande! sean campeones de fraternidad; afronten los desafíos de la vida dejándose orientar por la creatividad fiel de Dios y por buenos consejeros.”  Papa Francisco a los jóvenes en la JMJ 2023.

 

Terminó la primera parte del proceso electoral.  Escogimos a dos candidatos y el 15 de octubre elegiremos al nuevo presidente.  Como sucede en muchos casos y países, tendremos ‘balotaje’, una segunda vuelta entre los dos más votados.  Proclamados los resultados oficiales inicia una nueva campaña electoral.

Hemos sido testigos, en varios procesos electorales, de cómo los partidos y movimientos políticos y los candidatos, en lugar de plantear sus propuestas, presentar y defender sus planes de gobierno, atacan a sus contrarios de manera burda, exponiendo sus antecedentes personales, falta de honradez, inexperiencia, desacreditan sus estudios y profesión, inventan incapacidades, husmean sobre sus bienes, carácter, aspecto físico… ‘sacan todos los cueros al sol’, haciendo interpretaciones maliciosas o inventando falsedades para descalificarlo.  Todos dejan de lado la ética política.

Hablan sobre la familia, padre, madre, hijos, círculo de amigos, de trabajo, de empresa, de los movimientos políticos que lo apoyan, de los intereses económicos que representa, de los respaldos -principalmente financieros- que reciben para su campaña...  Pero ¿será verdad? o se armarán mentiras, utilizando todo tipo de artimañas, incluso de las nuevas tecnologías de comunicación.  Se lanzarán juicios condenatorios y temerarios que resten puntos al oponente frente a sus seguidores y a los indecisos electores.

Harán esto aprovechándose de que buena parte de la población carece de formación política y de conciencia crítica frente a decisiones importantes, por lo que no le interesa conocer ni analizar las propuestas de los candidatos, simplemente se dejan llevar por las subjetividades, minuciosidades, banalidades, que las asumen como verdaderas y sin verificar las difunden en sus círculos familiares, grupales o sociales.

En estos casos, el populismo es palpable, los aspirantes terminan ofreciendo lo que no cumplirán, engañando al pueblo y manipulando sus necesidades y expectativas.  Ofrecerán una sociedad segura, sin delincuencia, sin corrupción, con empleo, con trabajo, con crecimiento económico y con salud, educación y bienestar para todos, sin decir cómo, cuándo ni de dónde obtendrán el presupuesto para hacerlo…

Al faltar transparencia y no decir la verdad se crea una sociedad que se divide por uno u otro candidato.  En medio de mentiras, el ganador llega desprestigiado y sin apoyo de casi la mitad de la población.  Terminamos injuriando a ‘los otros’ y sintiéndonos ofendidos por ‘los demás’, por lo que atacamos, amenazamos, con ganas de ‘venganza’, generando división, conflicto y violencia.  Esto no es bueno ni justo.

Con estos antecedentes, como cristianos la campaña electoral que queremos debe ser distinta: exigimos que eleven el nivel de debate, sin mentiras ni engaños, sin insultos ni diatribas, que expongan propuestas serias y viables, para que con conocimiento de causa optemos por el mejor proyecto.  Soñamos a lo grande, en la fraternidad, en la solidaridad, en que los candidatos sientan que ‘el otro’ también es parte del ‘nosotros’ y que todos somos responsables del futuro del país.

Hay que confrontar siempre con la verdad, sustentando lo que decimos, analizando y valorando objetivamente las propuestas.  Tenemos el mandato de “no levantar falso testimonio ni mentir”, principio que debemos promover en nuestros círculos y trabajar arduamente para que en los medios de comunicación y en las redes sociales se difunda la verdad y no mentiras ni ataques u ofensas.

Frente a la dura realidad que vivimos es necesario promover la escucha y el diálogo, los acuerdos mínimos posibles y transparentes, la confrontación de ideas con altura y verdad, para que el candidato que gane genere, con el apoyo de todos, soluciones a los problemas que nos afectan, especialmente a las mayorías empobrecidas y excluidas.  Solo la verdad nos lleva a la justicia y a la paz.  ·  #ComuniquemosEsperanza

 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

sábado, 19 de agosto de 2023

carta No.198: ¡Recuperemos la PAZ!

Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 198 – 20 agosto 2023
---------------------------------------------

¡ Recuperemos la PAZ !

“El conocimiento y la estima por los demás también pueden crecer en la escucha mutua, hasta el punto de reconocer en el enemigo el rostro de un hermano” (Papa Francisco, Jornada Mundial de la Paz, 2020).

"Vivir, hablar y actuar sin violencia no es rendirse, no es perder ni renunciar a nada.  Es aspirar a todo" (Papa Francisco, video del Papa, abril 2023)

En el Ecuador de hoy, en mayor o menor grado, todos tenemos miedo, angustia.  Nos sentimos amenazados, inseguros, con el pavor de que en cualquier momento nos asalten, roben, hieran…  Estamos perplejos porque un candidato presidencial fue asesinado por sicarios en medio del resguardo policial.  En el imaginario colectivo están latentes manifestaciones de violencia e inseguridad del pasado.  Anhelamos volver a sentir tranquilidad, seguridad y paz.

El país está sumergido en una espiral de violencia de la que es complejo y difícil salir.  Una realidad completamente nueva para la mayoría, peligrosa y desafiante para el gobierno y no sabemos cómo enfrentarla.  La violencia es el resultado de muchos factores sociales, laborales, económicos, educativos, culturales… que han degradado y minado la institucionalidad.  Hay bandas delincuenciales, crimen organizado y agentes de mafias internacionales que han sometido al país.  La violencia y la inseguridad tienen mil formas de manifestarse, y lo más grave que con el poder que manejan son capaces de comprar o doblegar a determinadas autoridades de las diversas funciones del Estado para ponerlas a su servicio.  Los guardianes del orden, de la paz, de la justicia, vemos con terror que fenecen, son chantajeados o se convierten en cómplices y/o encubridores del crimen organizado dando paso a la impunidad y barbarie.

¿Cómo enfrentarlas?  La represión, la militarización del país, el incremento de las penas, el cambio de fiscales y jueces amedrentados y corrompidos por autoridades probas… son acciones que pueden paliar en algo el problema, pero no son suficientes.  Es importante enfrentar el origen del problema, solucionar la pobreza extrema que afecta a una creciente población: generando fuentes de trabajo digno y bien remunerado; estimulando y promoviendo mayor productividad y eficiencia; dotando de servicios básicos a las poblaciones sin que esto dependa de su tamaño; implementando un servicio de salud integral, eficiente, eficaz y oportuno; aplicando como política de Estado una educación universal, gratuita y de calidad. Dando atención preferente a los más desvalidos y vulnerables… El Papa Pablo VI, advertía que no hay Paz duradera sino hay Justicia.

La responsabilidad es de todos, sin excepción, personal y socialmente de comprometernos a recuperar la institucionalidad de lo público, que normada por leyes justas garantice el ‘Bien Común’. Construirlo es tarea prioritaria e impostergable.  La esencia de la política es trabajar por la comunidad, en la que nadie se quede fuera, sin descartados ni excluidos.  Debe garantizar, por encima de cualquier interés personal o de grupo, el bien común.

Esta labor es de todos, sin excepción, por el hecho de ser humanos.  Si confesamos ser cristianos, testigos de Jesucristo, en medio del mundo, esto se convierte en mandato divino.  Recomendamos examinarnos leyendo Mateo 25, 42-45: una propuesta clara, un desafío concreto y un pedido radical a cada uno.  No podemos quedarnos indiferentes: somos o no somos ‘testigos’, que damos razón de nuestra fe con obras y no solo con palabras.

Imaginemos, por un instante, un ‘Estado Samaritano’ que por todos los medios busca dar de comer al hambriento, de beber al sediento, atender y curar al enfermo, rehabilitar al detenido, emplear al desempleado, desechar la corrupción y la impunidad, administrar justicia justa, promover la paz, erradicar la violencia y garantizar la seguridad.  Donde todos podamos ganarnos el pan de cada día con nuestro esfuerzo y trabajo digno.  Es un inmenso sueño por el que debemos trabajar a tiempo y a destiempo para hacerlo realidad.

Erradicaremos la violencia y la inseguridad solo con justicia, con escucha, con diálogo, con consensos, sin privilegios, sin negociados, sin ladrones de cuello blanco, con un Estado fuerte y sólido, con instituciones confiables, con funcionarios atentos a las necesidades del pueblo, con políticos que sirvan a la gente, con un pueblo organizado, educado, saludable, que camine unido y busque siempre el bien de todos.  ·  #ComuniquemosEsperanza

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

domingo, 13 de agosto de 2023

carta No.197: ¡Ni una gota más de sangre!

 

Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 197 – 13 agosto 2023
---------------------------------------------

¡Ni una gota más de sangre!

“Anhelo que en esta época que nos toca vivir, reconociendo la dignidad de cada persona humana, podamos hacer renacer entre todos un deseo mundial de hermandad. Entre todos: «He ahí un hermoso secreto para soñar y hacer de nuestra vida una hermosa aventura. Nadie puede pelear la vida aisladamente. […] Se necesita una comunidad que nos sostenga, que nos ayude y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar hacia delante.»”.  Papa Francisco, Encíclica Fratelli tutti, No. 8.


Profunda consternación, desolación, indignación, tristeza… generó el execrable y cruel crimen político del candidato presidencial Fernando Villavicencio; así como los viles asesinatos del alcalde de Manta, Agustín Intriago, liquidado junto a la joven deportista Estefanía Chancay o contra el candidato a asambleísta de Esmeraldas, Ríder Sánchez, unidos a otros funcionarios públicos que han sido víctimas de asesinatos, atentados, extorsiones o secuestros.  Miles de ciudadanos anónimos han sufrido los mismos hechos, pero al carecer de relevancia social, son olvidados rápidamente, apenas mencionados en la crónica roja. Estas muertes no pueden ni deben quedar en la impunidad. Unimos nuestras voces de condena por estos crímenes, a la vez que expresamos nuestra solidaridad con sus familiares y allegados.

Nos aflige la angustia y el miedo que siente la gente y la inseguridad que vivimos todos. El sicariato y las bandas organizadas ligadas al narcotráfico son auténticos grupos terroristas que gozan de casi una total impunidad; gracias a la pasividad o ineficiencia del gobierno y a la complicidad desvergonzada de los encargados de administrar justicia que han permitido que nuestro país se haya transformado en una tierra sin ley y en un Estado casi fallido.

La crisis ecuatoriana, además de la violencia e inseguridad, tiene otros síntomas políticos, económicos, culturales, ambientales y sociales. A las puertas de las elecciones adelantadas, para escoger presidente y vicepresidente de la república y asambleístas, en el pueblo hay muchas más dudas que certezas y esperanzas.

Hay políticos que contemplan su ombligo, que pronuncian autocomplacientes monólogos y son incapaces de escuchar los clamores y angustias del pueblo y peor de dialogar para lograr acuerdos y construir el bien común. Padecemos de un tribalismo político, donde cada sector, partido, grupo económico o social sólo busca sus propios intereses y acceder al poder para dominar en vez de servir.  Nuestra sociedad está fragmentada en posiciones muchas veces irreconciliables. Carecemos de un proyecto político auténticamente nacional, sin excluidos ni descartados.  Tenemos una crisis de verdad, en la que la propaganda y las redes buscan manipular la conciencia ciudadana.  Contexto que hace que nuestra frágil democracia sea prácticamente inexistente y sea apenas una sombra de lo que debe ser: “el que quiera ser el primero entre ustedes que sea haga su servidor” (Mateo 20, 26).

Aquí y ahora preguntémonos ¿qué postura asumimos los cristianos? Ante hechos dolorosos no podemos sumirnos en la indiferencia ni rechazar, sin más, la acción política, porque “es una altísima vocación, es una de las formas más preciosas de la caridad, porque busca el bien común” (Fratelli tutti 180).  Es primordial construir caminos para la paz, la escucha, el diálogo y la fraternidad con valores democráticos como la tolerancia, la libertad, la justicia, la participación y el bien común.

El Estado debe responder ante la angustia del pueblo fortaleciendo las instituciones, caso contrario, seguirá el derrame de sangre, tarea impostergable del gobierno actual y venidero. Es vital unirnos, evitando que nuestras diferencias ideológicas creen barreras insalvables que nos impidan construir el Ecuador de justicia y paz que todos queremos, recordando que son “bienaventurados los que trabajan por la paz, pues serán llamados hijos de Dios” (Mateo 5, 9).  El Reino de Dios es nuestra referencia, Reino de vida, verdad, justicia, paz, gracia y amor.

En este contexto inédito, en la historia reciente de nuestro país, recogemos las palabras del papa Francisco: “Ante tantas formas mezquinas e inmediatistas de política… la grandeza política se muestra cuando, en momentos difíciles, se obra por grandes principios y pensando en el bien común a largo plazo” (Fratelli tutti, 178).

¡Venga a nuestro Ecuador, tu Reino, Señor!  ·  #ComuniquemosEsperanza 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

viernes, 11 de agosto de 2023

Justicia y Paz ante la situación de Ecuador

 “Levántate y camina sin miedo”
Papa Francisco, JMJ 2023

La Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, ante la difícil, complicada y sangrante situación que vivimos como país, propone y convoca a todos los ciudadanos de buena voluntad a recuperar el valor de la vida, a construir la paz con justicia y superar el miedo que coarta nuestra libertad y destruye la democracia.

Condenamos los extremos violentos a los que hemos llegado como sociedad polarizada, enfrentada y egoísta.  Mientras sigamos con una actitud sorda, sin escuchar al otro, al que piensa distinto y queremos imponer nuestra forma de ver y pensar, no llegaremos a ninguna parte, sino a terminar destruidos y abandonados.

El desafío es devolver la dignidad a todas las personas, organizarnos y construir comunidad, recuperar los valores evangélicos para una vida buena e íntegra para todos, en la que ni el miedo ni el egoísmo nos atrincheren y nos dejen escondidos en espera de un salvador.

Oramos por el descanso eterno de Fernando Villavicencio y nos solidarizamos con su familia, allegados y simpatizantes.

“Levántate y camina sin miedo Ecuador”

Quito, 10 de agosto de 2023



domingo, 6 de agosto de 2023

carta No.196: nuestro Voto Construye el Futuro

Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 196 – 6 agosto 2023
---------------------------------------------

nuestro Voto Construye el Futuro

“Anhelo que en esta época que nos toca vivir, reconociendo la dignidad de cada persona humana, podamos hacer renacer entre todos un deseo mundial de hermandad. Entre todos: «He ahí un hermoso secreto para soñar y hacer de nuestra vida una hermosa aventura. Nadie puede pelear la vida aisladamente. […] Se necesita una comunidad que nos sostenga, que nos ayude y en la que nos ayudemos unos a otros a mirar hacia delante.»”.  Papa Francisco, Encíclica Fratelli tutti, No. 8

 

Este 20 de agosto acudiremos a votar en elecciones anticipadas.  Elegiremos asambleístas, que serán los responsables de normar el comportamiento de todos y vigilar porque todos, incluidos ellos mismos, cumplan la Constitución y las leyes.  También elegiremos presidente y vicepresidente de la República, responsables de una administración honesta y eficaz de los recursos disponibles, y los que pueda conseguir, para solucionar los problemas del país.

Es tarea de los mandatarios elegidos, y que debe ser estrictamente cumplida, priorizar las necesidades más sentidas de la población de acuerdo con la disponibilidad de los recursos, ofreciendo a cada uno una visión y esperanza de futuro.  Es fundamental que sepamos hacia dónde vamos, qué sacrificios debemos hacer y cuáles son los resultados que esperamos a corto, mediano y largo plazo.

Un dicho popular dice que “el pez se pudre por la cabeza”, esto significa que la primera tarea de las autoridades electas es dar testimonio de honestidad, veracidad, servicio, confiabilidad, austeridad y eficacia.  El ejercicio cabal del poder comienza con el escogimiento de sus colaboradores y lo que se haga o se deje de hacer, es siempre su responsabilidad, ya que delega funciones a personas de su confianza.

El mandatario es escogido de entre todos para que haga las veces de todos, no es alguien predestinado para gobernar, sino que se ha preparado para desempeñar esa función, pero la elección es una decisión de la ciudadanía que ve en él, en su vida, en sus valores, en sus capacidades, en su pasado, en sus compañeros y allegados...  a la persona indicada que trabajará y servirá con fidelidad, efectividad y eficacia para cumplir los anhelos del pueblo.

Todo hace pensar que el elegido debe ser el mejor y más capaz para orientar y acompañar a la ciudadanía en su búsqueda de un mañana mejor.  Depositamos en él la confianza que le convierte en nuestro mandatario y todos somos sus mandantes.  Pero debe estar claro que no le entregamos poder para que nos domine y nos haga sus vasallos, le hacemos representante de cada uno para que esté atento a nuestra palabra, necesidades, sueños y esperanzas…  Es el bien común de todos y nuestra voluntad las que debe seguir, así como tiene que señalar el camino que hemos de recorrer en su compañía.

Penosamente, al poco tiempo de los resultados electorales, hay miles de arrepentidos de haber votado por tal persona o partido.  Población que se ve obligada a salir del país en búsqueda de seguridad, emigran incluso arriesgando su vida; otros van perdiendo la esperanza y creen encontrar la causa en una falsa democracia, que se ha convertido en politiquería malsana y perversa, por lo que prefieren una dictadura.

La corrupción y desvergüenza en el sector público y privado, la pérdida de la razón de existir de las instituciones, la casi ninguna fuerza moral y de respeto que tienen las autoridades frente a la ciudadanía, el relativismo y amoralidad en los politiqueros, la permisividad e indiferencia de la ciudadanía; la banalidad, mediocridad y falaz tramposería de los jueces nos tienen indefensos y en el abismo…

Ser elegido para ejercer una función pública es de los más grandes reconocimientos que una persona puede alcanzar y por lo mismo implica la máxima responsabilidad ética y ciudadana.  Moralmente la responsabilidad de los electores es equivalente.  No los elegimos para que, con nuestro voto, robe, mienta, abuse del poder...  La inmensa responsabilidad del voto exige que nos informemos y formemos políticamente para evaluar y discernir sobre la información recibida, analizarla y confrontarla con los valores éticos propios y sociales, para saber qué país propone y cuál es el que quiero para todos.  El voto es un compromiso personal, por eso tiene que ser consciente, libre y fruto de un serio discernimiento.  ·  #ComuniquemosEsperanza

 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.

domingo, 30 de julio de 2023

carta No.195: Consultas para cuidar y preservar la Casa Común

 

Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe

Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 195 – 30 julio 2023
---------------------------------------------

Consultas para cuidar y preservar la Casa Común

“Un crimen contra la naturaleza es un crimen contra nosotros mismos y un pecado contra Dios” (No. 8).  “Toda criatura posee su bondad y su perfección propias.  Las distintas criaturas, queridas en su ser propio, reflejan, cada una a su manera, un rayo de la sabiduría y de la bondad infinitas de Dios” (No. 69).  Papa Francisco, Encíclica Laudato Si’, 2015

 

En Ecuador, el próximo 20 de agosto, además de elegir presidente y asambleístas, votaremos en dos consultas populares sobre la conservación de la naturaleza: en la primera, nacional, decidiremos dejar o no indefinidamente inexplotadas las reservas petroleras en el campo ITT, en el Parque Nacional Yasuní, el lugar más biodiverso del planeta; en la segunda, solo en Quito, decidirá sobre la prohibición o aprobación de minería en el Chocó Andino, declarado por la Unesco como reserva de la biosfera.

El papa Francisco, en la Encíclica Laudato Si’, afirma que todos los seres de la naturaleza poseen un valor propio, al reflejar la bondad infinita de Dios en la creación, y deben ser preservados. Los seres humanos, lejos de explotar y destruir el ambiente para obtener beneficios económicos, debemos salvaguardarla para las futuras generaciones.  El Papa subraya la invalorable importancia de la Selva Amazónica y de las selvas tropicales como la del Chocó, y el valor intrínseco de cada ser viviente en ellas. Las selvas son necesarias para la totalidad del planeta y para la subsistencia de la humanidad.

“El cuidado de los ecosistemas supone una mirada que vaya más allá de lo inmediato, porque cuando sólo se busca un rédito económico rápido y fácil, a nadie le interesa realmente su preservación. Pero el costo de los daños que se ocasionan por el descuido egoísta es muchísimo más alto que el beneficio económico que se pueda obtener. En el caso de la pérdida o el daño grave de algunas especies, estamos hablando de valores que exceden todo cálculo” (Laudato Si’, No.36).

El Parque Nacional Yasuní, único en el mundo por su biodiversidad y hogar de los dos últimos pueblos en aislamiento voluntario, está amenazado desde hace décadas por la extracción petrolera en los bloques 16, 67, 31 y recientemente en el ITT (bloque 43) donde el Min. del Ambiente ha comprobado 12 derrames de petróleo desde 2016.

En general, la extracción petrolera ha ocasionado la pérdida irreversible de aproximadamente una sexta parte de la selva Amazónica, sin haber logrado que sus beneficios permitan a los ecuatorianos superar la pobreza. Luego de 51 años de explotación petrolera, uno de cada tres ecuatorianos continúa siendo pobre.

Las reservas son escasas y en pocos años el país dejará de ser exportador de petróleo (carta 180, Justicia y Paz).  Ecuador necesita una transición ordenada y gradual hacia una sociedad participativa, equitativa y sustentable, su patrimonio natural lo convierte en un país privilegiado por su biodiversidad y su riqueza cultural.

De igual manera, la minería metálica en áreas de alta biodiversidad agotará las reservas de agua y generará residuos tóxicos que impidan la conservación de los ecosistemas. El porvenir del Chocó Andino debe basarse en el ecoturismo y la agroecología, amigables con el ambiente.

El futuro y bienestar de las siguientes generaciones depende de nuestra capacidad de respeto a la naturaleza, basado en el turismo ecológico y el bioconocimiento, dejando a un lado el consumismo absorbente que obliga al acaparamiento de bienes y servicios (no esenciales ni necesarios), que causa también corrupción e impunidad.

El abuso desenfrenado de los recursos naturales continuará mientras la humanidad siga en su carrera egoísta de acumulación. Más allá de decir Si a la vida y a la conservación, con todo lo que ello implica, trabajemos arduamente para cambiar los hábitos cotidianos, ya que muchos de ellos demandan abundantes recursos del medioambiente que deben ser extraídos por diferentes medios, unos legales y otros ilegales. Lamentablemente, el consumismo es el gran motor que mueve todo tipo de actividad humana y rompe los equilibrios propios del planeta.

Estamos invitados a cuidar y preservar la Casa Común.  ·  #ComuniquemosEsperanza 

Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.