Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe
Comisión
ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 258– 13 de octubre 2024
---------------------------------------------
El Voto: Corazón de la Democracia
“…pensando hoy en lo que significa el "corazón" de la democracia: juntos es mejor porque solos es peor. Juntos es bueno porque solos es triste. Juntos significa que uno más uno no es dos, sino tres, porque la participación y la cooperación crean lo que los economistas llaman valor añadido, es decir, ese sentido positivo y casi concreto de la solidaridad que surge de compartir y plantear, por ejemplo en el ámbito público, cuestiones sobre las que existe convergencia”, Papa Francisco.
Nos
encontramos nuevamente ante un proceso electoral. Los candidatos irrumpen en
nuestra vida cotidiana, proclamando que tienen la solución a todos nuestros
problemas. Se presentan como "iluminados", armando por sí solos
propuestas con el fin de cautivar al electorado, buscando convertirse en una
especie de "rey Midas" que, con solo pronunciar palabras, creen poder
resolverlo todo. Son "demagogos estrella" que, con sus "cantos
de sirena", nos sorprenden, pero permanecen alejados del pueblo, sin
contenido ni sustento real. Así, demuestran que carecen de propuestas viables
para enfrentar los gravísimos problemas que atravesamos.
Debemos
ser conscientes de que, en esta "democracia representativa", la
participación de la ciudadanía se reduce al acto de votar; no existe una
participación activa y efectiva. En cada elección, arriesgamos tanto nuestro
presente como nuestro futuro. No podemos quedarnos como meros observadores,
"balconeando" lo que sucede a nuestro alrededor. Es éticamente
inaceptable tomarlo a la ligera, mostrarse indiferente o ignorar la
trascendencia de una elección presidencial y legislativa. Debemos votar con
plena conciencia, no solo para cumplir con una obligación, mucho menos por
compromiso o, peor aún, por intereses particulares.
Debemos
participar activamente para evitar la indiferencia, que es un cáncer para la
democracia. No basta con conocer los nombres de los candidatos o hacer campaña
por uno; es crucial exigir, conocer y analizar sus propuestas, antecedentes,
vínculos y fuentes de financiamiento. También debemos evaluar sus principios,
capacidad de liderazgo, y su disposición a servir, no a servirse. Solo así
podemos empezar a sanar esta democracia gravemente enferma, que clama por
participación y cooperación ciudadana.
No
nos dejemos engañar por soluciones fáciles que se difunden en redes sociales y
medios cooptados por el poder. Para superar esta crisis, debemos unir
esfuerzos, apasionarnos por el bien común y trabajar para sanar un corazón
democrático gravemente herido por la corrupción y la ilegalidad, que destruyen
la institucionalidad.
Nuestro
voto debe ser consciente y reflexivo, evaluando si los planes de los candidatos
promueven inclusión, desarrollo económico con equidad, sostenibilidad,
solidaridad y el bien común. Es fundamental que ofrezcan mejorar la calidad de
vida, la convivencia, la participación democrática, la libertad, la seguridad,
la salud, la creación de empleos dignos, y la lucha contra la corrupción y la
impunidad, así como la recuperación de la institucionalidad y la legalidad.
“…El
centro de gravedad de toda democracia sana […] reside en la representación
popular, de la que depende el destino nacional para todo el periodo del
mandato. De que la elección sea buena o mala depende la prosperidad o la
decadencia, la salud o la perpetua enfermedad del estado. Hay, pues, que tomar
conciencia plena de la responsabilidad que tenemos […] Hay que llevar al poder
personas […] que actúen con objetividad, honestidad e incorruptibilidad para
que un gobierno democrático logre conquistar el respeto y la confianza del
pueblo” (Muñoz Vega, 1978).
El
voto es el corazón de la democracia. #ComuniquemosEsperanza
Con los ojos fijos en El, en la realidad y la
fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz,
resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar,
reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario