Con
los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe
Comisión ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 204 – 1 octubre 2023
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El
cambio es posible con equidad y justicia
Bienaventurados
los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Mateo
5,6
“La
cada vez mayor desigualdad en América Latina es una herida dolorosa" Papa
Francisco, mayo 2023.
Muchos de estos lacerantes problemas
están en el origen de la situación de violencia y descomposición social que
actualmente lamentamos en nuestro país.
Las inequidades son estas grandes
desigualdades sociales, moralmente inaceptables y que deben ser eliminadas con
políticas apropiadas. La economía ecuatoriana produce más de lo suficiente para
eliminar la pobreza y satisfacer las necesidades de todos. El 1% más rico de la
población tiene tantos ingresos como todos los pobres del país juntos, que
representan un tercio de todos. Ésta es
la dimensión social de la inequidad.
Las injusticias se reflejan también
entre regiones. En el campo, más de la mitad son pobres, mientras en las
ciudades esta situación afecta a la cuarta parte de la población. Las zonas más deprimidas se encuentran en la
Amazonía rural, en los páramos y también en zonas de la Costa donde se
encuentran las mayores haciendas agroexportadoras.
La dimensión étnica de la inequidad es
profunda y ha perdurado desde la conquista hispánica, afectando no solamente a
los indígenas sino también a los afrodescendientes y montuvios. Las mujeres son
discriminadas de varias formas, y sus salarios, bajo las mismas condiciones de
calificación, son inferiores a los de los varones en un 10%.
Una dimensión de la inequidad a veces
olvidada es la intergeneracional. Si
continuamos depredando la naturaleza como lo hacemos ahora, las generaciones
futuras no podrán disponer de agua, tierra fértil y alimentos como los tenemos hoy…
Ante la contienda electoral del 15 de
octubre, los candidatos no deben convencernos y lograr nuestros votos con un
baratillo de ofertas y promesas falsas que, de acuerdo a la situación económica
real del país, no van a cumplir. A estas
alturas ya no podemos poner nuestra esperanza en discursos y palabras falaces. La
persona que sea electa apenas tendrá año y medio para actuar. No podrá cambiar radicalmente la actual
situación, pero podrá reducir las inequidades para sentar las bases de un
Ecuador más equitativo y justo.
En el debate entre los candidatos
Daniel Noboa y Luisa González, debemos ver si nos hablan con claridad ¿cómo van
a reducir las grandes inequidades sociales?, ¿cómo van a generar empleo
productivo con especial atención a los pequeños establecimientos y a la
economía popular y solidaria?, ¿cómo van a fomentar la agroecología para
favorecer a los campesinos, conservar la tierra y producir alimentos
saludables?, ¿cómo van a democratizar el crédito, la capacitación y asistencia
técnica?, ¿cómo van a cambiar el sistema educativo para que los estudiantes
adquieran destrezas laborales que les permitan trabajar con dignidad en el
futuro?, y ¿cómo van a preservar las fuentes de agua y de vida para las futuras
generaciones?. Veamos si exponen en el
debate: políticas concretas orientadas a reducir la inequidad integral.
Siempre hay oportunidades para cambiar
las inequidades. Esperamos que no se repitan las respuestas generales y
demagógicas. Deseamos que el debate nos
ilustre a todos para votar con conocimiento y conciencia.
· #ComuniquemosEsperanza
Con los ojos fijos en El, en la realidad y la fe" es una
publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado de reuniones
periódicas de los miembros de la Comisión para analizar, reflexionar y proponer
alternativas, a través de estas cartas.
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