Con los ojos fijos en Él
en la realidad y la fe
Comisión
ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 282– 30 de marzo 2025
---------------------------------------------
“Prohibido desanimarse”
“Vivir la vocación, no a medias, sino a la santidad. Es hermoso que junto a él (Paulo VI) y a los demás santos y santas de hoy, se encuentre Monseñor Romero, quien dejó la seguridad del mundo, incluso su propia incolumidad, para entregar su vida según el Evangelio, cercano a los pobres y a su gente, con el corazón magnetizado por Jesús y sus hermanos” Papa Francisco, Homilía de canonización, 14 de octubre de 2018.
El 24 de marzo coinciden tres
aniversarios especiales: los 45 años del asesinato de Mons. Romero, los 40 años
de Maquita Cushunchic y el cumpleaños del Padre Antonio Polo.
La imagen, la palabra y el testimonio de
San Romero de América siguen vivos, vigentes y presentes. Monseñor Óscar
Arnulfo Romero vivió con sencillez y coherencia el Evangelio. Caminó junto al
pueblo, con los pobres y excluidos, escuchando sus penas y dolores. Su
compromiso con la defensa de los derechos humanos creció hasta convertirse en
una voz clara y valiente contra los abusos e injusticias del poder. Fue la voz
de los que no tienen voz, y cargó en su propia carne el dolor de los
desaparecidos y asesinados por la dictadura salvadoreña. Durante sus tres años
como arzobispo de San Salvador fue reiteradamente amenazado de muerte, pero
jamás se desanimó. Con valentía enfrentó al gobierno, al ejército, a la policía
nacional civil y a los escuadrones de la muerte, hasta ser finalmente
asesinado. ¡Qué gran ejemplo para nosotros!
El Padre Graziano Mason, nacido en
Italia en 1945, llegó a Chile en 1972 y fue expulsado por la dictadura de
Pinochet. En 1976 arribó a Ecuador, donde trabajó en Muisne – Esmeraldas. Allí,
con la fuerza de la fe y las manos de los campesinos, nació la OCAME. Luego de
ocho años de presión y amenazas de terratenientes y políticos, se trasladó al
sur de Quito, a la Parroquia Cristo Resucitado. Uniendo la experiencia de OCAME
con la acción del Movimiento Juvenil Cristo Vive del Sur, promovieron la venta
directa al consumidor de productos campesinos, con peso y precio justo. Así
nació, en 1985, el Movimiento Comercializando Como Hermanos (MCCH), que luego
se transformó en la Fundación Maquita Cushunchic, hoy liderada por la Hna.
María Jesús Pérez. Desde una fe liberadora, Maquita ha enfrentado al sistema
que oprime al campesino. Ha impulsado la Coordinación de Mujeres, la
Coordinación Nacional de Artesanías y Alimentos, la Coordinadora Nacional de
Producto Campesino, la empresa social Maquita Productos, la Agroexportadora, la
Cooperativa de Ahorro y Crédito, el Turismo Comunitario y la red
latinoamericana RELACC. Están presentes en 20 provincias, con más de 600
organizaciones aliadas. Cuatro décadas de lucha por la economía social y
solidaria están recogidas en el libro Prohibido desanimarse.
El Padre Antonio Polo, nacido en Italia
en 1939, llegó al Ecuador en 1970 invitado por Monseñor Cándido Rada. Se
instaló en Salinas, provincia de Bolívar, una de las más empobrecidas del país.
Desde la práctica cotidiana del Evangelio y junto a voluntarios de la Operación
Mato Grosso y la Misión Salesiana, impulsó un proceso de organización
comunitaria que hoy es referente nacional y continental. A través de
cooperativas y comunidades, se generaron miles de fuentes de trabajo, se
cubrieron necesidades básicas y se sembró la semilla de una economía popular y
solidaria, cuya marca emblemática es El Salinerito. Durante 55 años, este
camino ha estado marcado por el trabajo, la entrega, la honradez, la
colaboración y el servicio.
Frente a los problemas, pobrezas y
desafíos, el Padre Polo, junto a jóvenes voluntarios y la comunidad, ha
demostrado que la lucha contra la pobreza se construye con organización,
capacitación, trabajo honesto, ahorro y cuidado de la naturaleza. Las “dos alas
del colibrí” —la motivación y el servicio— han dado el impulso diario para
afrontar con esperanza las adversidades que más afectan a los pobres.
Estos
peregrinos de la esperanza son grandes ejemplos de entrega, testimonio, amor,
justicia y paz. Prohibido desanimarse, porque siempre hay aliento cuando
caminamos juntos. #ComuniquemosEsperanza
Con los ojos fijos en El, en la realidad y la
fe" es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz,
resultado de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar,
reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario