Con los ojos fijos en
Él
en
la realidad y la fe
Comisión
ecuatoriana Justicia y Paz
carta No. 115– 16 de enero 2022
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La Paz es Educación
“…la instrucción y la educación… constituyen los principales
vectores de un desarrollo humano integral: hacen a la persona más libre y
responsable, y son indispensables para la defensa y la promoción de la paz.
…son las bases de una sociedad cohesionada, civil, capaz de generar esperanza,
riqueza y progreso” (Papa Francisco - 55 Jornada
Mundial de la Paz, enero 2022).
Históricamente, nuestro sistema educativo ha
tenido un desarrollo desigual y diferenciado, fruto de inequidades
socioeconómicas y una ineficaz cobertura de los servicios públicos. Si bien
existe un aumento de cobertura, gratuidad de la enseñanza pública, impulso a la
inclusión, crecimiento de tasas de matriculación; existe también un mínimo
incremento del financiamiento, asimetrías marcadas entre zonas urbanas y
rurales, con tasas de acceso inferiores al promedio nacional pese al incremento
en la cobertura para grupos étnicos y más empobrecidos. La mala calidad de la
educación es evidente.
En la Constitución vigente, la educación es
definida como un derecho de las personas y un deber ineludible e inexcusable
del Estado. Y, dispone que la educación debe centrarse en el ser humano y su
desarrollo integral… En la realidad, estos enunciados son solo retórica estéril
e ineficaz. La crisis educativa se ha acrecentado con el covid 19 y se
ha constituido en un desafío nacional que demanda acciones inmediatas.
Antes de la emergencia sanitaria,
aproximadamente 268 mil niños, ya estaban fuera del sistema educativo; 187 mil
tenían rezago escolar de más de dos años; 7 de cada 10 estudiantes de 7mo.
grado de EGB tenían un nivel insatisfactorio en lenguaje y matemáticas; 6 de
cada 10 estudiantes consideran que están aprendiendo menos. Se estima que el 22%
carecen de acceso a internet.
La pandemia obligó al cierre de las
instalaciones educativas, pasando a la virtualidad, lo que afectó a más de 4.4
millones de estudiantes, especialmente a los más pobres y vulnerables. Al mismo
tiempo, los ingresos económicos se redujeron en el 84,3% de los hogares, obligándoles
a abandonar sus estudios.
Si bien las familias se esfuerzan en tener
herramientas que ayuden a sus hijos a continuar con sus estudios, en muchas
ocasiones, dicha conectividad es deficiente y solo 2 de cada 10 estudiantes
cuentan con equipos para su uso personal.
En este contexto, de un día para otro, las
salas, comedores, dormitorios e incluso patios se convirtieron en aulas
improvisadas, en las que los padres de familia se transformaron en inexpertos
facilitadores del aprendizaje y los estudiantes tuvieron que enfrentar la falta
de internet, de equipos y autocapacitarse en las plataformas digitales para
continuar con sus estudios.
La tecnología apoya a la educación y es muy
eficaz, pero demanda planificación, recursos humanos y económicos, además de
equipos con acceso a internet, plataformas adecuadas, capacitación a docentes,
adaptación de las estrategias a los distintos entornos. La pandemia evidenció
que el país no estaba preparado para el modelo educativo “on line”. La
excelencia educativa en el país es solo una declaración. Lamentablemente los
más pobres son los que reciben una educación deficiente.
“Es necesario forjar un nuevo paradigma
cultural a través de «un pacto educativo global para y con las generaciones más
jóvenes, que involucre en la formación de personas maduras a las familias,
comunidades, escuelas y universidades, instituciones, religiones, gobernantes,
a toda la humanidad»" Papa Francisco.
Para que haya paz en Ecuador es
necesario que la educación sea inclusiva, equitativa, con suficientes recursos
humanos, sicopedagógicos, económicos, con infraestructura de primera, con
excelencia académica, con docentes bien remunerados… La Paz es educación. · #ComuniquemosEsperanza
Con los ojos fijos en El, en la realidad y
la fe es una publicación de la Comisión ecuatoriana Justicia y Paz, resultado
de reuniones periódicas de los miembros de la Comisión para analizar,
reflexionar y proponer alternativas, a través de estas cartas
"La paz es educación" y en nuestros barrios de Quito muchas personas no tienen la posibilidad de estudiar porque no tienen medios adecuados, por justicia debemos exigir que "la educación sea inclusiva, equitativa" para que los más pobres tengan ese derecho!
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